NUESTRA MISIÓN

PATRIOTAS de nuestro PAÍS las ISLAS BALEARES. Y puestos a hablar de sentimientos: Balearic, is not Catalonia!

viernes, 2 de marzo de 2012

LAS NUEVAS SS CALLEJERAS (socialistas y sindicatos)


El Gobierno del PP admite entre veladas manifestaciones que no podrá alcanzar el límite del 4,4% impuesto por Bruselas, debido al fraude ocasionado en la economía por el PSOE de Zapatero y Rubalcaba, que sostuvieron (mintiendo) hasta el último día de su destructivo gobierno, de que habían reducido el déficit público del 9% en 2010 al 6% exigido por Bruselas para 2011, que ahora comprobamos con estupor, que éste déficit público está en realidad en el 8,51%, (pendientes de saber los agujeros de Andalucía), con el terrible agravante de que para ese año 2012 el déficit debe situarse en el 4,4%. A lo que hay que añadir que la Seguridad social pasa de tener superávit como pronosticaban los socialistas en el Gobierno saliente, a estár en déficit; y en vez de crecer un 2,5% el PIB español como también pronosticaban Zapatero, Salgado y Rubalcaba, hemos entrado una recesión del -1,7%, lo que significa más gasto, menos ingresos y por tanto más paro (unos seis millones de parados) para el año 2012.

Antecedentes: Antes de conocerse esa falsedad contable del PSOE, el gobierno entrante del PP para ajustar el déficit del 6% (que se suponía real), al 4,4% exigido por Bruselas, decidió subir el IRPF a todos los trabajadores, funcionarios y jubilados de España, y paliar esa deuda en parte. Deuda que hoy Rajoy solicita poder situar en el 5,8% (ya que la deuda real es del 8,51% y no del 6% como aseguraba el PSOE), siempre a espera de lo que le diga Bruselas. Teniendo en cuenta que para el 2013 la deuda no podrá superar el 3% del déficit.

Pero lo verdaderamente frustrante, es que ahora con el nuevo déficit de más de 40.000 millones de euros extras que nos ha endosado el PSOE, el señor Rajoy del PP, se ve en la obligación ineludible de aplicar más recortes… Claro que si ahora hay que recortar, sólo le queda tocar los INTERESES DE LOS SINDICALES Y POLÍTICOS… Y es ahora donde a los Rajoy, Soraya y Cospedal, se les arruga el ombligo. 

¿Por qué será?

Será porque es fácil emplear la crueldad con los más débiles (trabajadores, funcionarios y jubilados), o porque lo otro, que es meter mano a los ingresos de partidos políticos y sindicatos, les afecta a ellos directamente. Para que nos situemos unos datos: Sólo los Sindicatos cobran 7.000 millones en cursos (inservibles) de formación; 500 millones de euros en ayudas a fundaciones y ONGs de la izquierda; 20 millones de euros en fondos y EREs y 10 millones de euros en intereses y plusvalías bancarias.

Y mientras estamos en ese himpas, los socialistas envían a sus cachorros a gritar: “Vamos a entrar a sangre y fuego” según el programa previsto por Rubalcaba contra los recortes (obligados) del PP. Y hemos visto con estupor lo que hacía Alberto Ordoñez (portavoz de la Federación Valenciana de Estudiantes, con 24 años) arengando a las turbas de estudiante y no estudiantes, diciendoles que iban a ganar la calle a "sangre y a fuego". Ese individuo ha sido aplaudido por todos los miembros del PSOE en el Parlamento valenciano al que llevaron como un héroe de la algarada valenciana. Algarada que sólo en Valencia y Barcelona, nos va a costar más de 18.000 euros en mobiliario urbano destruido y más de 100.00 euros de destrozos en comercios, entidades bancarias y en la sede del Congreso Mundial de Telefonía que se celebraba en Barcelona.

Que hacer ente esa disyuntiva creada por las castas políticas y sindicales insolidarias, está claro que eso de renunciar a prebendas, subvenciones y ayudas, no va con ellos, y sobre todo la izquierda no están por la labor. Y es por eso que entre ambos están arguyendo una nueva maldad: Ir a por la Iglesia exigiendo que la Iglesia pague el IBI de los templos y edificios (muchos considerados patrimonios Nacionales) y que se rigen por los acuerdos España-Vaticano en el Concordato, una ley entre estados aprobada por el Congreso y rubicada por el Rey el 3 de enero de 1.979.

He copiado una opinión de Luis Sánchez de Movellán titulado: EL IBI Y LA IGLESIA. 

En estos tiempos que corren se levantan voces acaloradas que solicitan que la Iglesia católica deje de estar exenta del pago del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), porque es un “privilegio” y porque en estos tiempos de crisis los Ayuntamientos no se pueden permitir el renunciar a lo recaudado por ese concepto tributario. De entrada, queremos aclarar algunos extremos acerca de ese supuesto “privilegio” de la Iglesia católica, haciendo dos consideraciones. La primera, que la exención del IBI no es en absoluto un privilegio especial de la Iglesia católica, pues hay muchos más ejemplos de esta exención (v. gr. los servicios públicos, como Defensa, Seguridad, Educación y Servicios Penitenciarios; los inmuebles destinados a usos religiosos por aplicación de Convenios con la Santa Sede, con la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas, con la Federación de Comunidades Israelitas y con la Comisión Islámica; los inmuebles pertenecientes a gobiernos extranjeros o que les sea de aplicación la exención en virtud de convenios internacionales; los inmuebles pertenecientes a la Cruz Roja; los terrenos ocupados por las líneas de ferrocarriles y los edificios enclavados en los mismos terrenos; los colegios concertados; los inmuebles pertenecientes al patrimonio histórico-artístico; y los inmuebles de entidades sin fines lucrativos).

Y todo ello, por no hablar de las lativentajas fiscales de que gozan los partidos políticos y los sindicatos: no tienen que declarar lo ingresado por las cuotas, las subvenciones, las donaciones, los rendimientos de sus actividades económicas o los rendimientos procedentes de las rentas de su patrimonio. Y ante estos chollos tributarios, ¿pide alguien que los partidos políticos o los sindicatos renuncien a sus enormes ventajas fiscales? ¿O que las mezquitas o las sinagogas paguen el IBI? ¿Pide alguien que las embajadas, los colegios o el Palacio Real madrileño pechen el mencionado impuesto? ¿Y el Ejército, las comisarías, las estaciones de RENFE o las cárceles? De todos estos ejemplos, ni pío. Pero sí, que lo pague la Iglesia. 


Como dice Luis Sánchez: Y los partidos y sindicatos, tan solidarios ellos, ¿no van a renunciar a alguno de sus privilegios? ¿Nadie va a pedir que paguen el IBI las embajadas de los Estados Unidos, Rusia, Cuba, Venezuela o China? ¿Nadie exigirá el IBI a las mezquitas o sinagogas? ¿Y a la RENFE? ¿Y a la Duquesa de Alba? Pues no, que pague la Iglesia. Y mientras, los ayuntamientos derivando los pobres a las instituciones eclesiásticas de solidaridad porque ellos no tienen presupuesto.

Resulta divertido (por no decir otra cosa poco caritativa) que a la Iglesia se la exija el pago del IBI para salir de la crisis, y de paso que también atiendan a las familias con problemas, mientras que la neoclase política y sindical se refocila en el lodazal de la corrupción más indecente y viven como pachás a costa de los españoles.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario