Hoy en España se da la siguiente paradoja: los Partidos Políticos
que son un medio digno y democrático para hacer gobernable un País, se han
convertido en Mini-Estados (a la usanza del Estado franquista), pero que se dedican a fagocitan los recursos ciudadanos en beneficio
propio, para así mantener una plaga de apesebrados, por los que están generando unos tornados que van arrasando Cajas de Ahorro, Seguridad social, Educación, Justicia..., y que a nivel nacional se han ido multiplicado por seis: PP, PSOE, IU, UGT, CCOO y Patronal, y a su vez x17 Comunidades Autónomas en entre los que hay que añadir y sumar: CIU, ERC, PNV, Bildu, PNG… etc. Por lo
que entre todos están arruinando, malversando, destruyendo y acabando con todos
los factores productivos:
-Tierra: la agrícola y urbanizada.
-Capital como
conjunto de recursos producidos por el hombre que se necesitan para fabricar bienes
y servicios como son: la maquinaria o las instalaciones industriales (fábricas,
talleres…).
-Trabajo: como
actividad humana, tanto intelectual como física. Teniendo en cuenta que toda
actividad humana requiere siempre un esfuerzo físico y unos conocimientos
previos que deben aplicarse y que deben ir adecuándose (formación continuada) a
las nuevas tecnologías y escenarios.
-Ojo al dato. El gravísimo problema que hoy tenemos en España es: que de un
Estado centralizado de economía central como fue el franquista, no se ha pasado
a un Estado liberal de libre economía de mercado, que era lo deseado por todos
los ciudadanos. Sino como hemos dicho, se ha pasado de un Estado centralizado a
seis Estados centralizados, que rigen sobre 17 Comunidades Autónomas, a su vez centralizadas y maniatadas por los partidos políticos.
O lo que es lo mismo: ¿Alguien se imagina un Estado donde
hubiera seis partidos comunistas intentado gobernar a la vez? Si hoy no es
viable un Estado comunista, menos lo es un Estado socialista (de taifas), como
el que rige hoy en España. Y donde nadie se pone de acuerdo.


Y que coste para que no haya engaño: O se reduce el poder y
las estructuras banales de los partidos políticos, sindicatos y patronal, o
este País se va al garete… Y en eso jugamos un papel inalienable todos y cada
uno los ciudadanos. ¡TODOS es TODOS! Prescindiendo de una vez por todas del
come coco de las siglas, motes, gestos, pictogramas y banderas.